Polichorros: se complica la situación del auxiliar Carlos Rosales
La causa judicial que investiga una seguidilla de robos y asaltos en el distrito Las Paredes y que tiene como protagonistas a sujetos que supieron vestir el uniforme de la Policía de Mendoza avanza a paso firme.
Ahora, el que está contra las cuerdas es Carlos Rosales quien se venía desempeñando como integrante del Cuerpo de Motorizada.
El individuo era amigo y compañero de Jonathan Osorio, la persona acusada de ser el líder de la banda.
La Fiscalía que tiene a cargo el caso encontró elementos que permiten afirmar que en una oportunidad manejó el móvil policial que llevó a Osorio a un terreno baldío donde se encontraban ocultos dos equipos de aire acondicionado, aparatos que habían sido robados de una vivienda y que luego fueron colocados en la dependencia de Cuerpos Especiales.
Por tal motivo, Rosales fue imputado por «incumplimiento de los deberes de funcionario público» y también por «encubrimiento agravado». En ese sentido, el representante del Ministerio Público Fiscal está convencido de que el individuo estaba al tanto de las andanzas de su colega.
Un dato interesante es que entre los uniformados involucrados hay pocos códigos, ya que, al parecer, habría sido el propio Osorio quien «lo mandó al frente».
Con un proceso judicial que lo tiene acorralado, ahora Rosales se quedará sin nada, ya que en las últimas horas el Ministerio de Seguridad tomó la decisión de separarlo de la fuerza.
La instrucción continúa y teniendo en cuenta que el barco se hunde no es descabellado pensar en que la historia se convierta en un mundo de soplones y de esa forma sigan apareciendo nombres de otros efectivos.
