Desde la Dinaf informaron que fue el Verbo Encarnado el que no quiso seguir con el convenio
La delegada en nuestra zona de la Dirección de Niñez Adolescencia y Familia, Dra. Romina Giraudo, reconoció que el Estado retiró a los niños de los hogares del Verbo Encarnado porque fue la propia institución religiosa quien decidió no seguir con el convenio.
La funcionaria explicó que, a pesar de una tregua firmada hace 10 días, fueron los religiosos quienes no quisieron seguir con el vínculo con la Dinaf. Sucede que desde que se hizo la denuncia por maltrato contra las monjas (hace un par de semanas) la relación no volvió a ser la misma.
Giraudo señaló que desde que se conocieron los testimonios de los niños, el Gobierno denunció ante la Justicia la situación. Esto originó un encuentro con los responsables del Instituto del Verbo Encarnado, quienes, según la delegada, “intentaron eludir la responsabilidad, además de naturalizar los maltratos”.
No obstante, a pesar de la denuncia y de la crítica a hacia las monjas, las autoridades de la Dinaf siguieron manteniendo vínculo con el Verbo Encarnado, con la condición de tener adentro del hogar a operadores del Estado.
La Congregación aceptó el nuevo formato, pero a los pocos días, teniendo en cuenta que la relación estaba agrietada, tomó la decisión de finalizar con el convenio, motivo por el cual la Dinaf tuvo que retirar los pequeños de esos establecimientos.