Cobro de Jubilados: las dos caras de la moneda
Durante la mañana de este viernes, se realizó la apertura de los bancos para el cobro de jubilados, pensionados y beneficios sociales. Se vieron dos postales bien diferentes.
Ante un público amplio, su mayoría de adultos mayores, los bancos se vieron colapsados y con extensas colas.
A pesar de que todas las entidades acatan y responden las mismas medidas, existieron amplias diferencias en lo que respecta a atención y organización.
El Banco Nación se lució ante un gran operativo para brindar seguridad y agilizar el pago. Desde la Gerencia se elaboró una metodología de trabajo que contó con la colaboración de Defensa Civil, Cruz Roja y fuerzas policiales.
Se cortaron las intersecciones de las calles 25 de Mayo con Corrientes y Entre Ríos para armar sobre la arteria un corralito con sillas para los adultos que se hicieron presentes, algunos desde la 1:30 de la madrugada. Además, este operativo contaba con baños químicos y voluntarios de Cruz Roja atendiendo algunas necesidades de los jubilados.
Distinta, fue la situación que se observó en la entidad bancaria Supervielle ubicada en avenida Hipólito Yrigoyen y Buenos Aires. Allí la concurrencia de jubilados se hizo presente desde las 4 de la madrugada y la fila se extendía por toda la manzana. Esto dejó en evidencia las falencias de esta sucursal, ya que no contaba con la asistencia de baños químicos, garita de sanidad o servicio de ambulancia ante la descompostura de algún adulto, entre otras atenciones.
Estas realidades, totalmente distintas entre una entidad bancaria y la otra, dejaron a la vista la falta de organización de algunos gerentes.
BANCO NACIÓN:
BANCO SUPERVIELLE: