El gobernador anunció financiamiento para productores viñateros
En el marco del Plan Vitivinícola 2020, el Gobernador Rodolfo Suarez anunció, vía twitter, financiamiento para productores viñateros. Se trata de 1.250 millones de pesos que permitirán mantener acotados los stocks vínicos para darle mayor previsibilidad y rentabilidad a toda la cadena de valor, atendiendo especialmente al productor primario.
Para ello se hará hincapié en tres acciones: La primera será el Crédito de cosecha y acarreo, a través del Fondo para la Transformación y el Crecimiento y del Banco de la Nación Argentina, para productores vitícolas de la provincia de Mendoza (Presupuesto: 850 millones de pesos). La segunda acción apunta al Programa Anticipo de cosecha para productores y contratistas de uvas con destino a mosto (Presupuesto: 400 millones de pesos), mientras que la tercera, a la puesta en funcionamiento del Banco del Vino.
El vicegobernador Mario Abed; el subsecretario de Agricultura y Ganadería, Sergio Moralejo, y el asesor del Ministerio de Economía y Energía Alfredo Aciar dieron detalles sobre la iniciativa en la Legislatura.
«El Gobernador, preocupado por las finanzas de la provincia, dio este Plan Vitivinícola 2020. Con un esfuerzo grande, de todo el equipo de Gobierno, elaboramos un plan para apoyar al productor vitivinícola, que incluya a todos los productores. Por eso agradezco al Ministerio de Economía y al Gobernador por su preocupación», sostuvo el vicegobernador.
Abed explicó que «las medidas incluyen financiamiento de $1.250 millones para la producción, financiación para cosecha y acarreo, y banco vitivinícola. El productor tendrá un precio especial por quintal. El programa se aplicará en todos los oasis productivos de la provincia de Mendoza. Esto es muy claro: no son subsidios sino un programa de financiamiento donde se devuelve con productos el dinero recibido».
Por su parte, Moralejo indicó que el hecho principal es «disponer de fondos para cosecha y acarreo. Es un proceso que está comenzando. Hemos dispuesto líneas de créditos a través del Banco Nación por 400 millones de pesos a un año de plazo y a una tasa del 20%. De esa tasa, la Provincia subsidia 12 puntos, mientras que la Nación, 8 puntos. El Fondo para la Transformación dispone 300 millones de pesos, también al 20%, donde la Provincia ha subsidiado 20 puntos. Por otro lado, tenemos el crédito de la elaboración, que es un crédito tradicional, que se hace con fondos del CFI, también con el mismo porcentaje donde la Provincia subsidia la tasa».
El subsecretario agregó: «Esto ha requerido de un esfuerzo fiscal de cerca de 170 millones de pesos por parte de la Provincia y un aporte de la Nación de 30 millones de pesos que terminan significando cerca de 8 puntos en la tasa del Banco Nación. Aclaró que la entidad bancaria «va a destinar todo su esfuerzo al sector cooperativo; el Fondo para la Transformación, a productores de menos de 20 hectáreas y, por otro lado, el fondeo del CFI, que también lo va a otorgar el Fondo para la Transformación, va con un fideicomiso de garantía».
Además, Moralejo detalló que «se ha generado un nuevo marco, que es una política de cosecha, acarreo y elaboración de uva para mosto, donde la Provincia ha destinado 400 millones de pesos. A su vez hemos advertido que el sector vitivinícola se viene repitiendo en crisis cíclicas, y nos parecía que era necesario dar un instrumento que pudiera estabilizar stock en el tiempo. Para ello pondremos en marcha al Banco del Vino».
A su turno, Aciar señaló que «el esquema de financiamiento que operativizará Mendoza Fiduciaria pretende anticiparle dinero a las bodegas que se inscriban con sus productores y contratistas para que puedan levantar la cosecha de uvas y elaborarlas como mosto sulfitado. A los productores se les otorgará 200 pesos por quintal hasta 3.000 quintales; en tanto que, los contratistas recibirán el mismo monto, pero con un tope de 600 quintales. En tanto que las bodegas recibirán 150 pesos por quintal para financiar el costo de elaboración del mosto, con un límite un máximo de 10.000 quintales. La relación entre la bodega y los productores o contratistas quedará plasmada en un contrato de maquila donde el bodeguero le debe garantizar como mínimo al productor o contratista, 60 litros de mosto sulfitado por cada 100 kilos de uva entregados. Finalmente, todo el mosto que se elabore bajo este esquema, más un aforo del 20%, se cederá en propiedad fiduciaria a un fideicomiso de garantía, con el objetivo de garantizar la operación crediticia».
El asesor del Ministerio de Economía agregó que «Las bodegas beneficiarias del esquema podrán devolver el crédito recibido una vez que vendan los mostos elaborados. En su defecto, por el contrato firmado, Mendoza Fiduciaria podrá vender los mostos cedidos en garantía en el mercado interno o externo y recuperar con el producido de las ventas los 400 millones de pesos que el Estado invirtió. De este modo, es una política que busca recuperar los fondos estatales para darle continuidad en los años venideros.»
Finalmente, el economista se refirió al Banco de Vino diciendo: «Es un esquema innovador que pretende asegurarle una renta mínima a los tenedores de vino tinto, ya sea que sean genéricos o varietales. A partir de su implementación, todos los actores del mercado vitivinícola que quieran ahorrar en vino, podrán hacerlo bloqueándolo voluntariamente por un período de tiempo determinado (al menos 1 año), con el objetivo de obtener una renta por ello que será calculada en función de la evolución de la tasa de inflación menos un índice de precio ponderado de los vinos tintos que se calculará para tal fin».
«Pretendemos que los tenedores de vino ahorren (bloqueen) 120 millones de litros de vino tinto. De esta manera, mejorarán los ingresos de los productores o tenedores de vino tinto, ya que los stocks se verán acotados a un nivel donde no haya excedente, provocando un aumento en los precios del vino para que el sector tenga mayor rentabilidad y, a la vez, formar una reserva de vino tinto para cuando disminuye la cosecha por condiciones climáticas, sanitarias o falta de riego y así evitar importar vino», completó Aciar.
