Nahir Galarza lloró y le dijo «mentirosa» a la madre de la víctima

Nahir Galarza enfrentó ayer a la mañana la primera audiencia en el juicio que la tiene como única acusada del asesinato de su exnovio Fernando Pastorizzo, que el 29 de diciembre pasado murió de dos tiros en Gualeguaychú. Empezó la jornada tranquila, se quebró cuando se leyó la descripción del crimen que se le imputa y le gritó «mentirosa» a la madre de la víctima cuando dijo que ella solía gritarle y golpear al joven.

Galarza, de 19 años, vestida con pantalón y saco negros, camisa blanca y esposada, llegó antes de las 8 a los tribunales de Gualeguaychú. No abrió la boca mientras pasó delante de un grupo de amigos y familiares de Pastorizzo que alzaban pancartas y carteles con la leyenda: «Justicia por Fernando».

Luego de escuchar la lectura de los alegatos de apertura de las partes, Nahir se negó a declarar. Por eso, los jueces Mauricio Derudi, Arturo Dumón y Alicia Vivian resolvieron incorporar al debate las dos declaraciones indagatorias que la chica realizó ante el fiscal de instrucción Sergio Rondoni Caffa.

En la primera de esas declaraciones la joven se autoincriminó. En cambio, en la siguiente sostuvo que los disparos que segaron la vida de Pastorizzo habían sido accidentales y se habían producido cuando él conducía una moto y ella, que iba de acompañante, intentó quitarle la pistola reglamentaria de su padre, policía de Entre Ríos en actividad.

«Fue un accidente, no supe qué hacer, me pudieron los nervios. Nunca en mi vida se me cruzó por la cabeza que podía matar a una persona, ni siquiera por todo el maltrato que me hizo», declaró la chica al ampliar su indagatoria el 16 de enero. Sostuvo que en la primera indagatoria había mentido porque temía que culparan a su padre, responsable del arma homicida.

Ayer, Silvia Mantegazza, la madre de la víctima, fue la primera testigo. Habló especialmente de la relación entre su hijo y Nahir.

Dijo al tribunal que una vecina le contó que «en más de una oportunidad» había escuchado que Nahir «le gritaba y le pegaba a Fernando». Fue en ese momento que la acusada le gritó «¡qué mentirosa!»

Tras la interrupción, Mantegazza declaró que en una ocasión esa misma vecina le alcanzó un teléfono inalámbrico que habrían arrojado en el frente de su casa en medio de estos episodios de violencia verbal y física de los que, según sostuvo, Fernando era víctima.

El hecho ventilado en el juicio ocurrió a las 5.30 del 29 de diciembre pasado, cuando Pastorizzo fue hallado malherido con un tiro en la espalda y otro en el pecho, y su moto y dos cascos tirados a su lado.

Galarza llegó al debate procesada con prisión preventiva por «homicidio doblemente calificado» por la «relación de pareja» con Pastorizzo y el «uso de arma de fuego», delito por el cual podría ser condenada a prisión perpetua. El agregado de la agravante de «alevosía» por el estado de indefensión de la víctima, pretendido por el fiscal Rondoni Caffa y los querellantes Rubén Virué, Sebastián Arrechea y Juan Carlos Peragallo, se resolverá durante el juicio.

La defensa de Galarza, a cargo del abogado José Ostolaza, intentará sostener la versión de la chica, de que le disparó accidentalmente a su exnovio en un contexto de peleas permanentes en las que, en realidad, ella era la víctima.

El juicio continuará hoy y se extenderá hasta el 28 de este mes.

Fuente:www.lanación.com