Caso Facundo Astudillo Castro: el ADN, el calabozo y la zapatilla, las principales dudas tras el hallazgo de un cuerpo
La aparición del cuerpo trajo nuevas dudas al expediente que investiga la desaparición forzada de Facundo Astudillo Castro, que deberán ser respondidas por el fiscal Santiago Ulpiano Martínez. El titular de la Fiscalía Federal N°1 de Bahía Blanca fue dos veces recusado y reafirmado en el caso por la jueza Gabriela Marrón.
La principal contradicción que tiene la causa es, quizás, la que existe entre la querella y Ulpiano Martínez. Con los mismos elementos, de uno y otro lado, las conclusiones son totalmente opuestas. Hay un indicio elemental en el que coinciden: aún no pueden confirmar que el cuerpo encontrado este sábado sea el de Facundo.
El 25 de agosto empezará la autopsia en el laboratorio del Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF), ubicado en la ex ESMA.
Se hará bajo el Protocolo de Minnesota, un procedimiento recomendado por el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en investigaciones de ejecuciones ilegales, muertes violentas, inesperadas o sospechosas por el uso excesivo de la fuerza estatal.
La identificación
La autopsia develará la causal y la data de muerte, si hay traumatismos y, lo más esencial: la identidad del cuerpo encontrado en la zona conocida como «Villarino Viejo», muy cerca del límite con Bahía Blanca.
Aún no fue confirmado que los restos encontrados semienterrados y en estado cadavérico sean del joven de 22 años desaparecido desde el 30 de abril.
A partir de las 9 del próximo martes, los forenses trabajarán sobre el cuerpo en la sede del EAAF. La fiscalía informó en un comunicado que la División Laboratorio Químico de la PFA solicitó que se remitieran muestras de referencia del padre biológico de Facundo para poder, en el caso de obtener algún perfil genético, efectuar los cotejos de ADN necesarios.
La perito de la querella, Virginia Creimer, estima que el informe definitivo podría tardar entre 30 y 60 días.
La zapatilla y la huella de una camioneta
La imagen de la zapatilla inmaculada en el terreno a pocos metros de un cuerpo desecho genera escozor. Se trata del indicio más importante que liga al cadáver con Facundo.
Su mamá, Cristina Castro, cree que es la misma que llevaba su hijo el día que desapareció y es muy similar a la que se observa en la última fotografía que le tomaron al joven, de espalda, junto a patrullero y al policía Mario Gabriel Sosa.
Leandro Aparicio, uno de los abogados de la querella, adjudicó la inquietante aparición a «la torpeza» o «a un mensaje mafioso» de la bonaerense. La hipótesis es que el cuerpo «fue plantando». La conjetura se profundiza por huellas de neumáticos encontradas en el lugar «que llegan hasta el cuerpo».
Creimer va más allá: «El cuerpo esqueletizado puede responder a influencias del paso del tiempo o las inclemencias climáticas. También puede haber estado sometido al agua salada. Pero es una zapatilla, igual a la que tenía Facundo, al lado de un cadáver reducido a restos óseos. Hay algo que no coincide».
Para la perito, «cuerpos que desapareen y aparecen oportunamente» es un sello característico de las fuerzas de seguridad. «No me está cerrando», aseguró.
El hallazgo del cuerpo
El sábado la Policía Federal dio por terminado el rastrillaje sin haber conseguido dar con el rastro de Facundo. Fue un «pescador amateur» el que se comunicó con la fiscalía y dijo haber encontrado un cuerpo en una zona que había sido parte del recorrido del equipo de búsqueda.
Ulpiano Martínez ordenó que se profundice sobre los hechos que rodearon al hallazgo de los restos. Quiere saber con certeza si hubo otras personas que lo vieron.
«La fiscalía tomó conocimiento que el sábado 15 otras dos personas se presentaron ante la Comisaría 2da de Bahía Blanca a denunciar la presencia de restos de un cuerpo en el lugar indicado y, por tal motivo, requirió al titular de la comisaría 2da de Bahía Blanca que informe si en su oportunidad puso en conocimiento de sus superiores tal circunstancia», detalló en el comunicado publicado en fiscales.gob.ar.
También pidió informes sobre las características de la zona, mareas y todo otro elemento de interés.
Por último requirió al Instituto Argentino de Oceanografía (IADO) -dependiente del Conicet- y al Organismo Provincial para el Desarrollo Sostenible (OPDS) que presten asistencia y colaboración a la autoridad policial y a los peritos designados.
El celular y la mochila
«Amigo, estoy sin señal y batería, en un rato te llamo». Ese fue el último mensaje que salió del celular de Facundo a las 20.21. El aparato nunca apareció. La mochila que llevaba -y que también se ve en la última fotografía que le tomaron- tampoco.
Para la querella, la señal del celular que tomaron las antenas de Ingeniero White se explica porque el aparato había llegado a esa zona pero no Facundo.
Para la fiscalía, es una evidencia de que el joven siguió su camino y confirma la declaración de una testigo en el expediente que dijo que lo llevó hasta el puesto fitosanitario de Bahía Blanca.
Los abogados de Cristina Castro ponen en duda las circunstancias de la obtención de esa declaración: barajan la posibilidad de que no haya sido Facundo el chico que la mujer trasladó.
Los detectives creen que ambos elementos, la mochila y el celular, podrían estar enterrados en el lugar donde se encontró el cuerpo.
Este miércoles, el Gabinete Científico de la delegación local de la PFA hará un rastrillaje específico y focalizado en el lugar, conforme pautas dadas por el EAAF.
El calabozo y manchas de sangre
La sandía de madera encontrada en el destacamento de Teniente Origone es uno de los principales indicios para la querella de un plan de encubrimiento por parte de la policía sobre el destino de Facundo. Lo encontró un perito de parte, no oficial, por lo que la fiscalía plantea -por lo bajo- dudas sobre su veracidad.
De todos modos, está siendo peritado. La querella insiste en que sea peritado el calabozo de esa dependencia policial. Aseguran que no fue preservado y que hay manchas de sangre en su interior. También esperan el resultado de los rastros encontrados en el patrullero y en un vehículo particular de una de las efectivas involucradas.
El DNI y mensajes borrados
Los peritos descubrieron una fotografía del DNI de Facundo en el celular de Jana Jennifer Curuhinca- la agente que detuvo al joven en Mayor Buratovich junto a Sosa- que había sido eliminada, al igual que mensajes y audios enviados por Xiomara Flores, la uniformada que declaró haberse cruzado con Facundo haciendo dedo y, de civil y en su auto particular, haberlo alcanzado hasta Origone..
Según la declaración de los agentes que le labraron el acta por circular sin tener el permiso por la cuarentena, dijeron que Facundo «exhibió y retuvo» el DNI.
Sin embargo, el oficial Alberto González, que dijo haberse encontrado al joven en Origone, le pidió su identificación. Según declaró, el joven no llevaba el documento y por esa razón le presentó el registro de conducir. La foto de ese documento también es parte de la causa.
Los horarios que dan los cuatro policías también son discutidos por la querella. Para la fiscalía, no hay elementos para detener a los efectivos.
El Ministerio de la Nación pidió una copia del expediente
Mientras la mamá de Facundo apunta contra el ministro de seguridad bonaerense, Sergio Berni, el ministerio de Seguridad de la Nación, solicitó copia completa de la causa, «con el objeto de realizar una evaluación integral y sugerir medidas de acción».
Según detalló el comunicado de Ulpino Martínez, «la solicitud fue realizada en el marco de las atribuciones conferidas a esa cartera ministerial, en cumplimiento de las obligaciones internacionales del Estado Argentino en materia de derechos humanos».
La cartera a cargo de Sabina Frederic sugirió, por ejemplo, la intervención del EAAF, una semana atrás.
Fuente: TN
Diario Mendoza Sur
