Cómo es la nueva estafa de la «carnicería de los cerdos»: cayeron más de 100.000 personas
Los usuarios deben cuidarse de las propuestas financieras que son demasiado buenas para ser verdad. ¿Por qué?
Los fraudes financieros no ven un límite y recientemente el gigante tecnológico Google tuvo que tomar cartas en el asunto. En concreto, la compañía presentó una demanda contra dos individuos acusados de utilizar la plataforma Play Store para difundir aplicaciones fraudulentas relacionadas con el comercio de criptomonedas.
Las apps resultaron ser el vehículo de propagación para una modalidad de engaño de alta sofisticación, que se conoce como la estafa de «carnicería de cerdos»; un fraude vinculado con la manipulación de los inversores novatos.
Según trascendió, más 100.000 personas descargaron las aplicaciones maliciosas y las pérdidas monetarias oscilaron entre 100 y decenas de miles de dólares. A continuación, todos los detalles.
Cómo es la nueva estafa bancaria
De acuerdo a las declaraciones de Google, los piratas informáticos subieron al menos 87 aplicaciones que prometían ser plataformas de inversión confiables, pero que en realidad funcionaban como una tapadera para manipular a los usuarios y apoderarse de su dinero.
Dichas apps son un claro ejemplo de la estafa de «carnicería de cerdos», donde los delincuentes se hacen pasar por una entidad financiera importante y persuaden a las víctimas para que depositen su dinero en dicha plataforma, con la promesa de grandes retornos a cambio.
No obstante, una vez que los usuarios ingresan el dinero en la cuenta de corretaje falsa, los estafadores dificultan o impiden los retiros de los fondos, o bien, las víctimas sufren una supuesta pérdida significativa que anula por completo su inversión.
Para protegerse frente a este tipo de amenazas, vale la pena considerar las siguientes recomendaciones:
- Educarse sobre los diferentes tipos de estafas financieras y mantenerse informado sobre las tácticas más recientes utilizadas por los estafadores.
- Verificar la legitimidad de las empresas o personas con las que estás tratando antes de compartir información personal o financieramente sensible.
- Utilizar contraseñas seguras y actualizadas para tus cuentas en línea.
- No hacer clic en enlaces sospechosos ni descargar archivos adjuntos de fuentes desconocidas.
- Revisar regularmente tus estados de cuenta bancarios y de tarjetas de crédito para detectar cualquier actividad inusual o no autorizada.
- Desconfiar de las ofertas demasiado buenas para ser verdad.
