Adquisiciones tech: la tendencia que está cambiando por completo el negocio de la salud

Cada vez más laboratorios y profesionales buscan soluciones en startups y compañías tecnológicas no tradicionales del ecosistema médico.

La pandemia del COVID 19 sacudió los cimientos de todas las industrias al imponer la digitalización de los servicios como única alternativa para continuar -y escalar- los negocios. Esta presión aceleró la implementación de proyectos tecnológicos que de otra manera podrían haber llevado más tiempo. Sin embargo, para algunos sectores el salto en materia de innovación que supuso la crisis sanitaria no se sostuvo o no fue suficiente para cumplir con las expectativas.

De hecho, la inversión en digitalización y el uso de nuevas tecnologías en el ámbito de la salud es mucho menor a lo esperado; incluso a pesar de que representa uno de los sectores productivos más potentes, valuado por la consultora Deloitte en u$s 8.5 trillones a nivel global.

Esta contradicción sucede principalmente porque las compañías y profesionales todavía suelen tener prejuicios difíciles de derribar al momento de sumar herramientas virtuales y plataformas a su labor diaria. Pero lo que no puede generarse desde adentro, puede buscarse hacia afuera; y esto es exactamente lo que comenzaron a hacer varias firmas a modo de resolver sus carencias tecnológicas según revelaron desde Streambe, compañía argentina que brinda soluciones para la mejora de procesos y la transformación digital de empresas.

En concreto, las compañías vinculadas al sector de la salud comenzaron a implementar lo que se conoce como innovación abierta. Esto es un enfoque estratégico que implica la colaboración y el intercambio de ideas, conocimientos y recursos entre una organización y fuentes externas, como otras empresas. A diferencia del modelo tradicional de innovación cerrada, donde las compañías desarrollan ideas internamente, la innovación abierta busca aprovechar las contribuciones externas para impulsar la creatividad y acelerar el proceso innovador.

Como resultado, cada vez hay más startups o empresas tecnológicas de tamaño mediano que se asocian o incluso son compradas por compañías de salud. Esto se refleja en los volúmenes y valores de las transacciones del sector que aumentaron entre 2020 y 2021 en un 32% y un 65%, respectivamente, según datos de la consultora PWC.

«Se experimentó un aumento de fusiones y adquisiciones de los fondos de capital privado, que representaron aproximadamente el 49% del volumen de transacciones y el 54% del valor de las transacciones en 2021, un marcado aumento en comparación con el promedio de los cinco años anteriores del 33% y 28%, respectivamente», escribieron desde la firma de servicios profesionales.

De acuerdo a Gastón Gugliotta, cofundador de Streambe, la industria de la salud nunca fue de invertir fuertemente en tecnología. «Siempre se vio como un gasto y no como una inversión», comentó el empresario, quien también destacó que de a poco comenzó a darse un cambio de paradigma que se basa plenamente en la innovación abierta. En el mismo, se escucha más a la demanda, al proveedor, al empleado, a las startups y a las universidades y se tiende a buscar el conocimiento afuera y no adentro.

«La tecnología venía atrasada e inició un proceso de digitalización importante que está cambiando el mercado. En esa línea, hay dos tipos de demandas que el sector tiene: estructurales y de negocio. La primera, tiene que ver con las políticas públicas y se relaciona con la conectividad y la infraestructura para generar una verdadera red federal de salud», destacó Gugliotta. Y sumó: «Con respecto a las demandas de negocio, hay cuestiones más tangibles como los softwares para resolver determinadas situaciones. Hoy se construyen aplicaciones para eficientizar los turnos médicos, existen las recetas digitales y herramientas de recolección y análisis de datos como soporte, entre otros desarrollos».

A medida que la transformación digital avanza en el sector de la salud, también se presentan nuevos dilemas como por ejemplo el rol de la inteligencia artificial en la disciplina o la securización de los sistemas. Se trata de discusiones que hoy en día encabezan la agenda de varias compañías de la industria y que reafirman la necesidad de una estrategia colaborativa entre compañías, start ups y organizaciones de diferentes ambientes profesionales; para garantizar un proceso innovador seguro y beneficioso para toda la sociedad.

Fuente: Infotechnology

Diario Mendoza Sur

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