Víctima de un asalto en la vía pública: “Me daba patadas y me pisaba la cabeza”
El día sábado, el área de prensa de la Policía de Mendoza informaba que una mujer de 28 años había sido asaltada en horas de la madrugada en calle Italia al 800 de San Rafael. El mismo parte señalaba que la joven había sido abordada por un delincuente que a golpes de puños le había sacado la bicicleta y el teléfono celular.
Indudablemente, un episodio más de inseguridad. Relatado así es, quizás, un relato frío, como muchos otros que suceden todos los días en San Rafael. Sin embargo, cuando se cuenta en primera persona la cosa cambia, tal como lo hizo la propia víctima.
“Voy a contar esto porque no quiero que le pase a alguien más. El viernes por la noche salí de trabajar, venía por Italia en bici y cuando faltaban tres cuadras para llegar a mi casa me cruce un hdp. Salió corriendo, me agarro de la mochila y me tiro al piso. Y sin decirme nada me empezó a dar patadas y a pisarme la cabeza”, expresó en un crudo relato en las redes sociales Gise, la joven víctima.
“Grite con todas mis fuerzas para que alguien me ayude. Nadie se acercó, solo una chica que le gritaba que me dejara porque me iba a matar. Pero eso provocó que me pegara con más fuerza. Yo no quería darle mi celular y siguió pateándome hasta que sentí que me iba desmayar. Solté mi celu. Agarro mi celu y mi bici y se fue”, manifestó luego.
Mi celular no valía mucho pero tenía fotos, vídeos de mis hijos y mis sobrinos, eso es lo que más me duele. Estaba lleno de recuerdos hermosos, pero a este hdp no le importó nada. Mi bici era mi medio de transporte para ir a trabajar, fue el regalo de mi marido y mis hijos amaban esa bici, la cuidaba mucho”, añadió.
En el final deslizó: “Seguramente tenga mamá, hermanas, primas o amigas y ojala nunca les pase lo que vos me hiciste a mí. Todavía tengo marcas, moretones e inflamaciones en la cara y en todo el cuerpo. Comparto esto porque duele y da mucha bronca que no podamos salir tranquilos o volver tranquilos a casa. Amo San Rafael pero no podemos vivir con hdp como estos”.