En la cárcel de San Rafael hay únicamente 6 extranjeros
El Gobierno nacional puso sobre la mesa de las discusiones la idea de deportar a los extranjeros que cometen delitos. Teniendo en cuenta que la inseguridad va en claro ascenso, y donde los episodios son cada vez más violentos, salen ideas como estas, que algunos analistas del tema dicen que sirven únicamente para la tribuna, dado que no solucionan el tema de fondo.
Más allá de que no es descabellado lo que propone el Ejecutivo nacional, considerando que la idea de un país con puertas abiertas es para la gente de trabajo y no para delincuentes, está claro que expulsar a los delincuentes extranjeros no moverá mucho la aguja a la hora de combatir el delito.
Pongamos en contexto el tema. Es decir, es correcto tener datos oficiales en la mano para darnos cuenta si en realidad es un cambio significativo y en tal sentido bajar la inseguridad considerablemente.
Desde el Ministerio de Seguridad, informaron que en Mendoza hay una población carcelaria de 4606 personas, de las cuales solamente 129 son extranjeros. Esto significa que representan apenas un 2,8 por ciento del total de los privados de la libertad.
Si miramos a San Rafael, el número es mucho menor, dado que hoy hay 451 presos y únicamente 6 son oriundos de otros países. Esa cifra es apenas un 1,33 por ciento. O sea, nada.
Lo cierto es que, independientemente de que son sujetos nocivos para la sociedad, expulsarnos inmediatamente del departamento, la provincia y el país no cambiará en absoluto la realidad.
