Caso Próvolo: una víctima dijo que la monja Kumiko filmaba a las chicas cuando se bañaban
El debate por los abusos sexuales en el instituto para niños hipoacúsicos sumó un nuevo día con un contundente y escalofriante testimonio.
Una mujer, hoy de 26 años, señaló que cuando era alumna del Próvolo sufrió todo tipo de vejaciones. En tal sentido señaló a varios religiosos como autores de esos ultrajes.
La joven dijo que cuando era niña fue abusada por los curas y la monja Kosaka Kumiko, también imputada, era cómplice.
Señaló que Hugo Corbacho, uno de los sacerdotes que está sentado en el banquillo de los acusados junto al también presbítero Nicolás Corradi y el jardinero del predio Armando Gómez, la había abusado en una oportunidad que la llevó de compras en su vehículo.
Añadió que en otra ocasión, un cura al que no pudo identificar la violó en una de los dormitorios del edificio.
En relación a la monja, que será juzgada en otro debate, indicó que era una persona malvada, que encubría los abusos y que maltrataba a los alumnos.
Remarcó luego que Kumiko tenía una filmadora que usaba para grabar a las niñas mientras se bañaban. Al parecer, ese aparato llegó a sus manos por parte de los curas.
Manifestó también que en una de las habitaciones del Instituto vio cadenas y muchas cajas de preservativos.
