A pesar de la promesa del Gobierno provincial el agua llegó con aumento
A mediados diciembre del año pasado, en audiencia pública, Aysam solicitó un incremento del servicio del 162%, argumentando que la inflación obligaba a aumentar la boleta con ese porcentaje en la mano. Lo llamativo es que la empresa estatal, manejada por la gente de Alfredo Cornejo, hablaba de inflación galopante como excusa para darle el mazazo al bolsillo de los mendocinos, pero por otro lado, el radical defendía a capa y espada las políticas económicas de su amigo y socio Mauricio Macri.
Finalmente, luego de un gran pataleo de la ciudadanía y organismos relacionados con la defensa de los consumidores, el aumento fue de un 100%.
El 2020 arrancaría con un 60% de incremento, luego vendrían 20% en marzo y 20% en mayo. Sin embargo, cuando el tercer mes del año comenzaba y el coronavirus golpeaba la puerta de la República Argentina, la historia cambio. Raudamente iniciaron las restricciones y la economía comenzó a tambalear.
No era difícil advertir que al poco andar, tanto el país, como la provincia, estarían en graves problema. Es que los números que había dejado Cambiemos no eran para nada bonitos.
Allí fue cuando llegaron algunos anuncios, entre ellos el de Aysam, indicando que se tiraba para adelante los aumentos.
Las autoridades señalaron que todo se postergaba para septiembre, pero parece que alguien tocó las teclas equivocadas de la calculadora y las boletas comenzaron a llegar con incremento.
La bronca es parte de la postal en varios rincones de la provincia. No son pocos los vecinos que han expresado su malestar por la falta de palabra del Gobierno provincial.
Diario Mendoza Sur
