El argentino Orly Terranova, sorpresivo líder del Dakar tras la segunda etapa de la competencia
El mendocino, que había tenido un gran comienzo, llegó segundo en el parcial por detrás de De Villiers y manda en la tabla general. Será un Dakar de estrategia, de cabeza muy fría, le contó a Clarín.
Todavía no entendía bien lo que estaba sucediendo. Se reía al ingresar en el campamento de Neom, el punto más norteño del derrotero del Dakar por Arabia Saudita, a sólo unos 200 kilómetros al límite con Jordania. Allí estaba Orlando Terranova, el mendocino que se había colocado en el segundo lugar en la etapa con el Mini del equipo X-Raid, puesto que le permitió colocarse a la vanguardia de la clasificación general en autos.
“Las diferencias se acortan en términos de cometer o no errores. Es un Dakar muy lindo. Me parece que esta carrera le hará muy bien al Dakar. Espero poder hacer muy buenos promedios para tener sobre el final un muy buen resultado”, explicó el piloto del equipo X-Raid tras completar la jornada entre las ciudades de Al Wajh y Neom.
Terranova surca el desierto camino a Neom. Foto: AP
Terranova comenzó a competir en el Dakar en 2005, cuando aún se disputaba en África, en la categoría motos, junto con Pablo Levalle, que ese año completó la carrera. Luego pasó a autos, logrando como mejor resultado fue 5° lugar en 2013 y en 2014. Hasta el momento tiene ganadas 6 etapas en la competencia más extrema del mundo.
Este año, navegado por el argentino Ronnie Graue, ganó el título mundial de Bajas Cross Country, logro que le dio un gran impulso para encarar el primer Dakar realizado en Arabia Saudita.
“Hay mucho polvo. La navegación es compleja. El terreno está lleno de piedras. Hay que ser fino con el manejo. Y hay que trabajar en lo físico para llegar bien a cada etapa”, explicó sobre las dos etapas realizadas hasta ahora en la competencia arábiga.
“La etapa de mañana la vamos a trabajar bien. Recibiremos la información en la reunión de pilotos y a descansar”, agregó el mendocino.
Terranova fue segundo en la etapa que unió a Al Wajh con Neom, al norte de Arabia, sobre un recorrido de 401 kilómetros, detrás del sudafricano Giniel de Villiers (Toyota). El argentino ahora lidera la clasificación general con una ventaja de 4m43s por sobre el piloto de la marca japonesa.
La competencia tuvo a Fernando Alonso con muchas complicaciones. Quedó detenido con la rotura de un neumático. Debió reparar el tren delantero junto con su navegante, el ex campeón en motos Marc Coma, y llegó muy retrasado al campamento con su Toyota.
En motos, la sorpresa la dio Ross Branch (KTM), piloto de Botswana, que se llevó el triunfo del parcial en la categoría motos. En realidad Branch fue catalogado como el mejor rookie (debutante) del último Dakar, en Perú. Pero aquí se destacó, ya que por primera vez los pilotos recibieron la hoja de ruta apenas 25 minutos antes de la partida, en Al Wajh. Por lo que todos debieron navegar mucho más de lo habitual.
El piloto argentino Kevin Benavídes, con Honda, fue cuarto en el especial, pero se ubica tercero en la clasificación general, a 1m32s del líder. El segundo puesto es para Sam Sunderland (KTM).
“Fue una etapa muy complicada, muy técnica. Con piedras y mucha navegación. En el kilómetro 140 me puse adelante. Abrí pista casi hasta el final. Me gustó mucho vivir esta experiencia en Arabia Saudita. Pero cuidé la moto porque estamos en una etapa maratón”, comentó el piloto salteño.
Otros argentinos, además de Kevin: Luciano Benavídes (KTM) está 7° en la general; Franco Caimi (Yamaha), 15°; Paco Gómez (Yamaha), 66°; Leandro Cola, (KTM), 74°, y Sebastián Urquía.
La etapa de este lunes fue maratón, ya que mañana las motos saldrán con apenas los 10 minutos asistencia que tuvieron hoy. Y mañana le entregarán la hoja de ruta. La 3ª etapa será un “rulo”, con largada y salida de Neom, sobre un recorrido de 489 kilómetros, de los cuales 404 serán de especial.
